De La Interpretación Profética Bíblica
De la interpretación profética Bíblica podemos estruturar su contenido para una mejor comprension de la misma. Para el entendimiento de la profecía en Daniel y Apocalipsis, es necesario situarse en perspectiva con relación a la revelación. Así tambien con los tiempos proféticos y la visión dada al profeta Daniel y al Apóstol Juan.
La revelación en las profecías bíblicas creemos, se establece, desde la perspectiva geográfica-doctrinal e histórica-temporal del profeta de YaHWeH.
Perspectiva geográfica-doctrinal del profeta de YaHWeH
Se sabe que tanto Daniel de Judea, como Juan de Galilea, eran Israelitas. Y sus Doctrinas basadas en las antiguas Escrituras Sagradas de Israel; como en Las Buenas Nuevas de Jesús de Nazaret, respectivamente. Así, creemos que, la profecía gira alrededor del Lugar Sagrado para estos, Jerusalén y el Templo de Salomón (Santuario terrenal). Constituyendo esto la perspectiva geográfica-doctrinal del profeta y de la interpretación profética Bíblica.
Perspectiva histórica-temporal del profeta de YaHWeH
El profeta Daniel en su visión, está ubicado físicamente al inicio del tiempo profético, en Babilonia, bajo su dominio. Teniendo hacia adelante los dominios de Media y Persia, de Grecia, de Roma, del Islán-musulmán y el fin. El Apóstol Juan se ubica hacia el centro, dentro del tiempo profético. Bajo dominio Romano, teniendo hacia atrás en el tiempo el dominio griego, medo-persa y babilónico. Y hacia adelante en el tiempo profético el dominio del islán-musulmán y el fin. Constituyendo esto la perspectiva histórica-temporal del profeta y de la interpretación profética Bíblica.
Como se dijo anteriormente, independientemente de la ubicación física y geográfica del profeta de YaHWeH; la profecía en ambos casos (Daniel y Juan), gira alrededor del Lugar Sagrado, El Santuario Terrenal. O sea, su interpretación está vinculada a la perspectiva geográfico-doctrinal del profeta del Elohim de Israel.
La noción de Bestia y los reinos, reyes, cabezas y cuernos
Por otra parte, la revelación se establece considerando las nociones de reinos, reyes, cabezas y cuernos; las diademas representan la corona del reino; todas están interrelacionadas y tendrán su dimensión e importancia temporal y territorial; así como política y doctrinal, sea esta de orden filosófico o/y religioso, según su trascendencia histórica en relación con la profecía.
Así surge la noción de Bestia (La Bestia-Gráfico) a quien Satanás, el Dragón, le ha dado su poder, su autoridad y su trono. Y esto para ejercer Dominio sobre “la Tierra Santa”; siendo su propósito actuar contra la verdadera Doctrina de YaHWeH el Elohim de Israel y de su Hijo Jesucristo.
Estas nociones tanto de Bestia y de su Dominio son fundamentales en la comprensión de la profecía.
De la interpretación profética en Daniel y Apocalipsis
Para poder comprender por ejemplo la revelación en Daniel 7 es necesario relacionarlo con Daniel 2; así como con Apocalipsis 13 y 17. Puesto se entiende que son complementarios y sería difícil entenderlos individualmente, y viceversa. También se deben integrar otros capítulos como Daniel 8 y 12; y Apocalipsis 12; 14; 15; 16; 18 y 19; y otros libros, con sus capítulos y versículos, de la Palabra del Altísimo de Israel.
Si pretendieramos entender la profecía de Daniel 7, por ejemplo, independientemente de los otros capítulos de Daniel y de Apocalipsis, se encontrarian diferencias fundamentales con esta revelación que nos ocupa. Dicho de otra manera, hay que integrar todas estas revelaciones proféticas. Y tratar de darle respuesta a todas las cualidades que aparecen en ellas. Intentando no omitir o dejar de lado ningún dato o carácter revelador, para poder entender algo de la profecía.
De los elementos simbólicos, metafóricos y alegóricos
En otro orden de ideas es necesario comprender que las profecías están llenas de elementos simbólicos, metafóricos y alegóricos. Estos van a estar referidos, obviamente, a hechos y/o cosas concretas, tanto espirituales como físicos en particular. Es cuestión de darle sentido, procurando no dar rienda suelta a la imaginación, y evitando toda cuestión fantástica y fabulesca.
Nota: Foto de encabezado. Tomado de: Enrique Medina. lalupaprofetica.com